Colombia en alerta por incremento del fraude digital: la IA se consolida como la capa protectora para combatirlo

La inteligencia artificial está revolucionando la ciberseguridad, optimizando los procesos de detección y mitigación de fraudes.

Los algoritmos de IA están reduciendo los tiempos de detección de fraudes al acelerar los procesos de análisis de patrones de transacciones sospechas que hoy se hacen con modelos de software tradicional y en algunos casos por humanos.

Bogotá, febrero de 2025. El fraude digital sigue creciendo en Colombia afectando sectores estratégicos como: la banca, retail, comercio electrónico y las telecomunicaciones. Según el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), en 2024 cerca de 250 mil personas fueron víctimas de fraudes tecnológicos; el 96% de los incidentes se presentaron en cuentas de ahorro, tarjetas de crédito y depósitos de bajo monto.

El aumento de estos delitos ha obligado a empresas y usuarios a fortalecer sus medidas de seguridad en línea para proteger las transacciones y datos personales. En los últimos tres años, los intentos de fraude digital en el país han incrementado un 859%, y el 39% de los colombianos ha sido víctima de engaños o robos a través de Internet (cifras de TransUnion).

Ante este escenario, la ciberseguridad se ha convertido en una prioridad, que impulsa la adopción de tecnologías avanzadas con inteligencia artificial para detectar patrones de fraude y prever amenazas potenciales. «La IA nos permite detectar a los ataques a tiempo y responder de manera proactiva. Su capacidad para analizar grandes volúmenes de datos rápidamente es fundamental para reducir los fraudes digitales y fortalecer la confianza en las transacciones en línea«, afirmó Ricardo Pulgarín, director de productos y servicios de ciberseguridad en OlimpIA.

Dentro de los ataques más comunes se encuentran el phishing; la inteligencia artificial analiza los enlaces y correos sospechosos para evitar posibles fraudes, y en el caso del ransomware (secuestro de datos) detecta actividades inusuales como el cifrado masivo de datos, bloqueando intentos repetidos de acceso no autorizado.

Para enfrentar este desafío, OlimpIA propone implementar medidas que ayuden a brindar una capa adicional de protección a las empresas a través de:

• Análisis predictivo y prevención proactiva: La IA analiza datos históricos y patrones de comportamiento para anticipar posibles riesgos y fortalecer las defensas. Esto marca un cambio de enfoque: de una ciberseguridad reactiva a una proactiva, que se adelanta a las amenazas en lugar de limitarse a responder después de que ocurren.
• Anticipación de vulnerabilidades: Los modelos predictivos de IA pueden entrenarse con bases de datos generadas a partir de Ethical Hacking para identificar posibles brechas de ciberseguridad en distintos sistemas antes de que los atacantes las exploten.
• Detección avanzada de amenazas: Gracias a tecnologías como el aprendizaje automático (machine learning), los sistemas impulsados por IA pueden analizar patrones de comportamiento en redes y sistemas. Esto les permite identificar anomalías que podrían indicar un ciberataque, incluso antes de que este ocurra.
• Integración con tecnologías emergentes: La IA también facilita la integración con otras tecnologías innovadoras como blockchain y ciberinteligencia, fortaleciendo aún más las estrategias de seguridad. Estas integraciones permiten desarrollar ecosistemas digitales más resilientes, donde la confianza y la protección de datos son prioritarias. 

Las instituciones financieras que han implementado soluciones de inteligencia artificial experimentaron una reducción del 40 % en las pérdidas por fraude (datos de la empresa de investigación de mercado Juniper Research).

Por eso, Colombia tiene el reto compromiso de mitigar los ciberataques que se presentan en los diferentes sectores económicos implementado soluciones de ciberseguridad, las cuales les permitan a los empresarios proteger su información para asegurar la continuidad de sus operaciones, salvaguardar la confianza de sus clientes y cumplir con las normativas en materia de protección de datos.